La sabiduría de las fresas
soy presente
un hoy de abeto tallado en el pasado
pincelando el aquaforte futuro
no me molestan los ayeres
algunos visten camisas ocres
otros son traslúcidos y soñolientos
me visitan por las mañanas
bebemos sonrisas
y untamos el pan con la sabiduría de las fresas
luego
las sombras
me susurran las manzanas que vendrán en diciembre
y duermo en el ahora del hoy mismo
para despertar
de nuevo
junto al reloj de lo que voy siendo
Buscando la sombra del relámpago
Si hay oscuridades atrapadas
en los ojos de las aves
y cansancios varados en las piedras:
¿por qué los filósofos mueren
buscando la sombra del relámpago?
¿por qué hay libros con hambre
acurrucados en las raíces de los árboles?
¿por qué los sonidos sueñan
con el vuelo del silencio primigenio?
Por si las dudas,
zurcí bocas a mis suelas para hablar con dios
en la grieta del asfalto.
Me designo
Bucanero sobrio y ladrón de ladrones.
Punto.
De tiempo libre para los oficios libres.
Punto.
Sufriente inmolesto y mártir justificado.
Doble punto:
Vivo en una buhardilla junto a mis muertos,
colecciono playas redimidas en caracoles viajeros,
duermo sin almohada y con espada al cinto,
me asombro fácilmente y sueño el mar,
despierto sin sol y alimento a mis polillas.
Punto y aparte.
Luego, soy feliz.
No me hambruna la soledad.