Héctor Michivalka – Honduras
Mi vida fue buscar
siempre buscar
Busqué la luz en vano
como un ciego
Cayendo como río
que se condiciona
por la fuerza de la inercia
así voy
Ahora que me encontré
doy fe
de que estoy perdido
A pesar de todo
la vida ha sido un hotel
barato pero acogedor
Me agradó aprender viajar
soñar equivocarme…
Vine a vivir
y morí varias veces
La muerte ha sido mi lazarillo
Letrero de neón
tartamudeas en clave Morse
pasajes
del callejón sin salida
donde la nostalgia
cerró sus puertas
Heme aquí con el tintineo
de un manojo de llaves
Aunque
me tocó bailar con la más fea
hasta el amanecer
no perdí el estilo
Si la suerte
persiste en ser la misma
me encapricharé
en maquillarla
Se ríe el destino de mí
porque
según él
impera su última palabra
Mientras
yo lo moldeo en el barro
como hizo el demiurgo
que dudaba de mí
Me gusta ser yo
porque no tengo otra alternativa
Si me retracto de ser el mismo
perdería mi esencia
La bestia del dolor
se divierte con sus rémoras de colores